Una llave maestra de tablero eléctrico, fue el regalo simbólico que marcó la jornada traspasando literalmente el futuro de sus vidas a cada uno de los y las orgullosas beneficiarias de Sence.
En un rincón de la Región de O’Higgins, donde las viñas se extienden hasta donde alcanza la vista, un grupo de 18 personas escribió un nuevo capítulo en sus vidas. Tras meses de estudio y esfuerzo, estos hombres y mujeres, muchos de ellos mayores de 30 años, recibieron sus diplomas como técnicos en instalaciones eléctricas con certificación Clase D, un logro que va más allá de un simple certificado.
La ceremonia, realizada el pasado 21 de octubre en el Centro de Eventos Piedra Río de San Vicente, fue una celebración de la voluntad y la perseverancia. Cada rostro de los y las egresadas junto a sus familias irradiaba orgullo, fiel reflejo de un sueño alcanzado, de una meta superada. Valeria Vargas Reyes, una de las egresadas, expresó con emoción la gratitud hacia sus profesores y familiares, quienes fueron su mayor apoyo en este camino. “Gracias a nosotros mismos, por no rendirnos y seguir adelante”, afirmó, dejando en claro que este triunfo fue fruto de un trabajo en equipo y de una fe inquebrantable en sí mismos.
Óscar Vargas Zerpa, otro de los egresados, compartió su experiencia con entusiasmo. “Ha sido una experiencia tremenda”, aseguró, destacando la calidad de la enseñanza y el ambiente de apoyo que encontraron en el CFT. Su historia, como la de muchos otros, demuestra que nunca es tarde para aprender y crecer.
Más que una capacitación, una transformación
Esta iniciativa, fruto de la colaboración entre el SENCE y el CFT Estatal de O’Higgins, va más allá de una simple capacitación. Se trata de una inversión en el futuro de estas personas, de una oportunidad para mejorar sus vidas y las de sus familias. Como señaló Octaviano Torres Muñoz, rector del CFT, este programa no solo entrega conocimientos técnicos, sino que también abre puertas a nuevas oportunidades laborales y a un desarrollo personal pleno.
Marcela Contreras Torres, directora regional (s) del SENCE, destacó la importancia de esta iniciativa para mejorar la empleabilidad de las personas. “Sabemos que este oficio les va a dar muchas oportunidades”, afirmó, resaltando el compromiso del servicio por brindar herramientas que permitan a las personas alcanzar sus metas.
Un futuro brillante
En esta ceremonia, no solo se celebró el pasado, sino que también se miró hacia el futuro. Doce de los egresados del curso de Sence, tomaron el desafío planteado por el programa y continuarán sus estudios en el CFT, demostrando una vez más su compromiso con la educación y su deseo de superación.
La historia de estos 18 hombres y mujeres es un ejemplo inspirador para todos aquellos que buscan un cambio en sus vidas, demostrando que, con esfuerzo, dedicación y el apoyo adecuado, cualquier sueño puede hacerse realidad.
