Tribunal decretó una pena efectiva de presidio.
Los hechos investigados por el fiscal especializado en delitos económicos, Francisco Caballero, se registraron entre los meses de mayo y agosto del año 2017.
Así se logró establecer que el imputado Luis Molina Molina, procedía a sustraer en cajeros automáticos, tarjetas bancarias de adultos mayores o quienes eran acompañados por personas de capacidades distintas, además de sus datos para posteriormente hacer giros o compras en el comercio.
Tras el juicio oral llevado en su contra por la Fiscal Marcia Allendes, y con el apoyo de funcionarios del equipo de robos de la Fiscalía de Rancagua, se consiguió que el Tribunal decretara una pena de 6 años de presidio efectivo por seis delitos de uso malicioso de tarjeta bancaria sustraída y hurto, ilícitos cometidos en carácter de reiterados./