La representante de O’Higgins explicó que el objetivo es enfrentar el delito de “marcaje” del que son víctimas los clientes, y que afecta principalmente a las mujeres y adultos mayores.
A raíz del incremento de los robos en las afueras de las entidades bancarias, que incluso han terminado con el homicidio de personas, la diputada por la Región de O’Higgins, Natalia Romero, decidió presentar un proyecto de ley que busca que las distintas instituciones financieras tengan la obligación de adoptar una serie de medidas de seguridad en beneficio de los clientes, que permitan evitar que sean marcados y terminen siendo víctimas de asaltos en el exterior de las sucursales.
Al respecto, la parlamentaria gremialista hizo referencia al incremento que dicho delito ha tenido últimamente, al punto de que en 2018 la Jefatura Nacional contra Robos y Focos Criminales de la PDI informó que hubo robos por más de $3.180 millones bajo la técnica conocida como “salida de banco” o “marcaje”, mientras que en 2021 se superaron los 400 casos en regiones como Santiago, donde más del 85% fueron calificados como robos con intimidación, violencia e, incluso, homicidio.
Por lo mismo, y si bien la representante del Distrito 15 reconoció que las medidas podrían ser consideradas como “restrictivas”, aseguró que “es indispensable si queremos disminuir de forma efectiva este delito”, detallando que las víctimas de los delincuentes suelen ser las mujeres o los adultos mayores, quienes acuden principalmente a los bancos para retirar su pensión o algún bono.
“Se ha vuelto una mala costumbre, durante los últimos años, ver en los noticieros que cada vez son más los chilenos que se transforman en víctimas de los delincuentes, quienes los ‘marcan’ mientras están en los bancos y los siguen incluso hasta sus casas para terminar robándoles. Eso ocurrió con mucha fuerza durante la pandemia, principalmente con el retiro de los 10%, pero hoy vemos que se ha vuelto una tendencia en nuestro país, siendo las mujeres y los adultos mayores las principales víctimas, perdiendo incluso sus vidas a manos de los delincuentes”, advirtió la diputada Romero.
En esa línea, la parlamentaria por O’Higgins explicó que la finalidad del proyecto es que las entidades bancarias estén obligadas por ley a tener que adoptar distintas medidas de seguridad para prevenir el “marcaje”, entre ellas restringir el uso de dispositivos móviles, como también ubicar los asientos al público en tal posición que no se puedan ver las transacciones de dinero; instalar mecanismos de registro biométrico o dactilar en los ingresos, además de cabinas privadas; mejorar la ubicación de las cámaras de televigilancia y garantizar que las autoridades tengan acceso a dichas imágenes.
Asimismo, Romero detalló que las instituciones bancarias o financieras que incumplan con dicha normativa podrán arriesgar multas que irían desde los $1,2 millones hasta casi los $25 millones.
“No nos olvidemos que antiguamente se permitía fumar en los espacios cerrados, en los buses y también en los aviones, y hoy pareciera ser una medida impensada. Por eso quisimos presentar este proyecto de ley, pensando en el bien superior que es la seguridad de todas las personas que acuden a los bancos y que exigen de parte de las instituciones una mayor seguridad”, insistió la legisladora.