Las altas temperaturas se hacen presente en la capital y debemos cuidarnos para mantenernos hidratados, evitar las quemaduras por el sol, por lo que de acuerdo a la enfermera y docente de Santo Tomás, Yulizen Alfonso de Armas “deberíamos contar con un kit de autocuidado para el verano”.
“Así como en casa debemos tener un botiquín de primeros auxilios, en verano es conveniente contar con un kit pequeño, que quepa en la cartera o mochila, para cuidarnos de las altas temperaturas y sus efectos colaterales”, explica la docente.
En estos meses debemos cuidarnos de disminuir nuestra exposición a los rayos UV, de alimentarnos de forma balanceada e hidratarnos; por lo que nuestro kit debe contar con a lo menos los siguientes elementos:
“Una botella con agua, lentes de sol o gorros que nos protejan del sol y protector solar para reaplicar cada 2 o 3 horas”, enfatiza Yulizen.
A esto, se debe sumar la necesidad de una alimentación balanceada, aprovechando frutas y verduras de la estación que nos brindarán vitaminas y antioxidantes necesarios para nuestro cuerpo.
“La ropa holgada de colores claros, preferiblemente de algodón por su gran capacidad de absorción debe estar dentro de las primeras opciones a considerar, así como el seersucker, la cual es confeccionada a base de algodón, pero algo más delgada y comúnmente rayada, ofreciendo más estilo”, cuenta.
Pero no sólo debemos preocuparnos por la ropa, ya que el calzado es un elemento crucial en esta época donde las altas temperaturas y las actividades al aire libre aumentan la sensación térmica.
“Los zapatos deben ser cómodos y preferentemente de telas permeables para evitar la humedad. Cuidar los pies no es sólo consejo para pacientes diabéticos, sino para toda la comunidad: niños, jóvenes y adultos”, enfatiza.
Finalmente, debemos tener en cuenta el contexto epidemiológico en el que aún nos encontramos, por lo que se recomienda además revisar las guías de autocuidado que el Minsal prepara para los veraneantes.
