- Con 27 años de historia en la región, la clínica se ha caracterizado por apostar fuertemente en el género femenino, posicionándose como una de las empresas con mayor representación de mujeres en la zona.
- En este día especial, resaltamos a 3 funcionarias que se han destacado por su entrega, compromiso y rendimiento en la institución.
Fundada en mayo de 1995, Clínica Isamédica tiene una rica historia en el rubro de la salud dentro de la Región de O'Higgins. Y por supuesto, gran parte de ese prestigio se debe a la importante labor que diariamente realizan las mujeres de la institución, quienes hoy en día son más de 470 personas y representan a más del 80% de la planta activa.
Tal es el caso de Isabel Riquelme Muñoz, una reconocida enfermera que desde el 2002 ejerce laboralmente en la clínica.
"Es increíble pensar que llevo 20 años trabajando acá. En un principio ingresé como enfermera clínica de pacientes hospitalizados en Médico Quirúrgico, atendiendo personas adultas y pediátricas. Sin embargo, posteriormente me enviaron a la UCI Adultos, un área crítica y de alta complejidad en la cual me desempeño hasta el día de hoy.
Sabía que era un gran desafío para mí, pero estoy muy agradecida de la oportunidad que recibí, ya que es un área donde cada día es incierto y estás al límite, lo que me fascina porque tengo la voluntad y vocación de entregar siempre lo mejor de mí.
Me apoyo mucho en las palabras de mi madre, quien me decía que cada vez que hiciera algo diera lo mejor de mí o mejor no lo hiciera. Esa forma de sentir la vida ha hecho que me comprometa y me sienta 100% parte de la Familia Isamédica.
En este lindo camino me tocó asumir la coordinación de la UCI en plena Pandemia, un escenario muy desafiante pero a la vez enriquecedor, donde entre todos debimos apoyarnos, superar el miedo y entregarnos por el beneficio de los pacientes.
Como mujer trato de complementar el ser mamá, profesional, esposa y guía de quienes me rodean, sin queja alguna. Es por esto que siento que ambos géneros merecen tener las mismas oportunidades, sin distinción".
Otro ejemplo para destacar es el de Anita González Reinoso, quien es Técnico en Enfermería de Nivel Superior (TENS) y lleva más de 5 años en la institución.
"Afrontar la Pandemia trabajando fue difícil para todos, ya que en un principio no se sabía mucho de los riesgos de contagio y la gravedad del virus, pero siempre tuve claro que mientras la clínica y los pacientes me necesitaran, acá iba a estar presente.
A pesar de las preocupaciones, trataba de tomar con humor todas las cosas que pasaban, manteniéndome positiva y anteponiendo la buena atención ante todo, porque siento que los pacientes valoran que alguien los escuche y les dé una palabra de aliento.
Siempre he pensado que las mujeres cumplimos un rol muy importante en todos los trabajos en que nos desempeñamos, porque no sólo somos trabajadoras, sino también dueñas de casa, mamás, amigas, hijas y tenemos que cumplir con todas nuestras labores.
En mi vida diaria (fuera del trabajo) soy dueña de casa, mamá y también trato de ser una buena hija. Cuando regreso a casa lo único que quiero es acostarme y descansar, pero no puedo porque tengo obligaciones que cumplir, así que me digo a mi misma, vamos que tú puedes.
Creo que las mujeres hemos demostrado que somos capaces de cumplir con todas las tareas que las vida nos presenta, y ése es el mensaje que trato de entregarles a mis seres queridos, para que nunca bajen los brazos y sigan luchando por lo que desean.
Recuerdo que mi papá, que está en el cielo, siempre me decía que trabajara y me hiciera valer por mí misma, pero que a la vez fuera humilde y nunca olvidara mis orígenes".
Mujeres activas y full comprometidas
Al igual que Isabel y Anita, resaltamos la historia de María Muñoz, quien desde hace 14 años se desempeña como Auxiliar de Servicio en la clínica.
"Mi principal responsabilidad es realizar aseos terminales en las camas cada vez que un paciente es dado de alta, una labor desafiante considerando el protocolo sanitario que se debe seguir. Reconozco que da un poco de susto poder contagiarse, debido a que uno tiene familia que puede ser vulnerable.
Por otro lado, el extremar los cuidados por tanto tiempo pasa la cuenta tanto física como emocionalmente, pero una debe ser fuerte y seguir adelante por el compromiso que tiene como trabajadora.
Hoy podemos ver que cada día hay más mujeres líderes y empoderadas dentro de la sociedad, sintiéndose importantes y competentes para realizar cualquier tipo de actividad que se les presente. Es admirable que seamos capaces de ser madres, esposas, trabajadoras y jefas de hogar, siendo siempre responsables en todos nuestros deberes.
En mi caso soy dueña de casa, funcionaria de Clínica Isamédica, mamá, abuela y esposa. Todos estos roles los cumplo con el mayor amor posible, y mi tiempo libre lo empleo en tratar de disfrutar al máximo mi vida junto a mi familia".
El factor común que une a estas 3 mujeres, como también a muchas otras que trabajan en la clínica, es el apoyo fundamental que reciben por parte de sus respectivas familias. Gracias a esto, son capaces de levantarse cada día con la convicción de que no están solas, y que su calidad de vida repercute directamente en sus seres queridos.-