Pasión, amor, color. La puesta en escena de La Bella Durmiente fue el plato fuerte de la Gala de Ballet 2019, actividad con que culminó el taller de danza clásica, dirigido por el alumno del Complejo Educacional Chimbarongo, Nicolás Jiménez Loeiza.
¿Cuántas veces de pequeños jugamos a pararnos en punta de pies y descubrimos que no es nada fácil?. Es que bailar ballet no es un juego, es fruto de la disciplina y el trabajo diario, sin feriados.
Una muestra del éxito asociado a la constancia es el avance experimentado por los jóvenes bailarines que brillaron sobre el escenario montado en el gimnasio del Liceo.
El aplauso surgió espontáneo tras la ejecución de las piezas de danza, el mejor aliciente para los artistas.
Para concluir con la gala, los integrantes del taller de ballet del Cech recibieron el justo reconocimiento al talento y disciplina, obsequios que se gestionaron a través de diversos aportes, en especial de la Municipalidad de Chimbarongo./
